sábado, 11 de mayo de 2013

El imperio contraataca

Es público y notorio que en la mayoría de las comunidades de pisos y urbanizaciones españolas, se las ven y se las desean para encontrar algún propietario con el suficiente arrojo y valentía probada, para hacerse cargo, como presidente de su comunidad. El resto de sus congéneres hacen mutis por el foro, sin llegar a demostrar ese ardor guerrero que se necesita para enfrentarse a sus aguerridos vecinos.

Pero, no hay regla sin excepción, por ejemplo, en un roncón perdido en la inmensidad de la marea de urbanizaciones que se extiende a lo largo y ancho de la costa oriholana, de cuyo nombre no es menester recordar, si se ha montado la batalla de Bailen, ante el anuncio de que un grupo de propietarios osan perturbar la paz legendaria de la que gozan- desde que entraron a vivir sus primeros pobladores-la presidencia y la administración de la citada urbanización. Cargos que hace años recalaron en su poder concedidos por obra y gracia de la promotora y que ellos pensaron de que eran para la eternidad, de tal guisa que se organizaron para que la fortaleza resistiere todo intento de aproximación o intromisión, por parte de la comunidad.

Pero he ahí, que de pronto surge un minúsculo grupo de osados habitantes de la aldea que intenta hacerse con la defensa de la fortaleza, y se entabla una lucha sin cuartel acusando a los enemigos de tener planes secretos para hacer desaparecer el poblado y sus aledaños. O bien, que intentan introducir ardientes llamaradas en las charcas de la aldea, junto a planes secretos para aniquilar la comunidad.

Los habitantes del poblado están inquietos, la duda surge ante un incierto porvenir. ¿A quien elegir para dirigir la fortaleza? En pocos días se sabrá por el anuncio de convocar a sus vecinos a reunirse en torno a los grandes espíritus, pero ya hay muchos habitantes del poblado que piensan que cuando el río suena agua lleva, y las aguas turbulentas que transcurren por el caudal de este río les incitan a limpiar el caudal de su cuenca.

viernes, 12 de abril de 2013

MONASTERIO DEL ESCORIAL

La tarde está oscura y fría,
la nieve cae sin cesar,
el viento arrecia con fuerza,
sobre el monasterio del Escorial.

Sus altas torres, al cielo,
cual inmortales se yerguen,
desafiantes al viento
cual si en reto ellas fueren.

¡Oh! monasterio de piedra
bella escultura de antaño,
en tu recinto celoso
guardas la historia de un pueblo.

En tus salones dorados
como cuenta la leyenda,
en otros tiempos lejanos
pasaron: Reyes y Reinas.

Princesas y caballeros,
cortesanas y guerreros,
 hicieron que tu recinto
brillase más que un lucero.

Y en las noches de verano,
sobre tus bellos jardines,
las más hermosas doncellas
dieron perfume a tus flores.

¡Oh! monasterio de piedra,
que inmóvil yo te contemplo.
Que triste y solo te veo
en esta tarde de invierno.

Ya no arriban a tus puertas
carrozas con seis caballos,
ni suenan ya las trompetas
anunciando la llegada
de los Reyes, de su corte.

Ya no relucen las lanzas
bajo el tibio atardecer,
ni
ves cruzar tus pasillos
guerreros en desafió.

Ya se extinguió el esplendor,
de aquel Rey que conquistó,
otros pueblos muy lejanos
allende el Mediterráneo.

Solo quedas tú, fiel amigo,
que guardas celoso al tiempo
la historia de nuestro pueblo,
el esplendor de un imperio.




lunes, 11 de marzo de 2013

Vivir en un piso desahuciado

Hace unos años mi esposa y yo decidimos fijar nuestra residencia en la costa alicantina y por ende adquirimos una vivienda en una de las innumerables urbanizaciones que jalonan la susodicha costa. En aquella época teníamos como vecinos mas próximos a una joven pareja,oriundos de Ecuador, quienes también habían comprado el adosado en el que habitaban. El cabeza de familia era un excelente profesional de la albañilería y entre su trabajo y las pequeñas chapuzas que hacia en el barrio cubrían el presupuesto familiar sin problemas. Hay que subrayar  que tuvieron un niño mientras estuvieron residiendo en esta urbanización. Pero, un mal día todo cambio, vino la maldita crisis que aún nos sigue golpeando, mi vecino perdió el trabajo y a los pocos meses les desahuciaron  de su vivienda dejando en la calle al matrimonio junto con su pequeño. Una situación dramática que les obligó a volver a su país de origen.

No cabe duda de que el regreso debió de ser amargo para esta joven pareja que veían truncarse el sueño de conseguir en el que entonces era un país de oportunidades en el cual querían crearse un futuro estable en donde poder vivir felices junto a su hijo, y que de pronto se desmoronó al quedarse sin trabajo y sin vivienda  junto con la pérdida de las letras que ya habían pagado

La mencionada vivienda, despues de haber estado vacía durante varios años, al final la entidad bancaria la vendió, al parecer por un precio de...saldo. Y aquí termina un drama familiar que se encuadra entre los miles de desahucios que vemos diariamente en una España que se ha derrumbado estrepitosamente ante la codicia y el desdén de políticos y financieros sin escrúpulos a los que solamente les guía un deseo; convertir este país en un cortijo privado desde el cual poder dirigirlo a su libre albedrío

Siguiendo con el hilo de este caso que en su día mucho me impactó, he seguido con dolor y rabia como miles de españoles, perdían sus casas sin la mínima consideración. Hemos visto como se las arrebataban a sus moradores para ir a parar a las entidades bancarias, que de facto se han convertido en las mayores inmobiliarias ofreciendo esas mismas casas a precios muy ventajosos, con crédito incluido.

Ahora yo me pregunto ¿Se puede vivir tranquilo en un piso al que sus antiguos dueños fueron un día desahuciados en el peor momento de sus vidas? Matrimonios de avanzada edad que malviven de una pensión miserable que apenas les llega para mantenerse no solamente el matrimonio , si no también sus hijos y nietos a los que la crisis ha obligado a refugiarse en la casa donde hasta ese momento vivían los abuelos.

De pronto llega el drama del desahucio, todos van a la calle, sin darles tiempo de recoger sus pertenencias, sus recuerdos, sus sueños. Familias enteras: Abuelos, hijos, nietos. Las fuerzas policiales los sacan a empujones sin la mínima consideración. Entran el medio del drama familiar sin apenas ver esa pareja de ancianos que apenas se pueden mover ante el peso de los años y las enfermedades, tampoco ven esos niños llorando desconsoladamente sin comprender por qué no pueden coger sus juguetes, tampoco les importa ver a una mujer a punto de dar a luz, o un hombre rondando los cincuenta quien después de haber dado los mejores años de su vida a la empresa en la que trabajaba, de pronto se ha visto en la calle sin dinero, y sabiendo de antemano de que ya no abra ningún futuro para él y su familia.
Ese drama omnipresente en la España de hoy lo sentimos a flor de piel cuando entramos en una sucursal bancaria y vemos enormes carteles que nos ofrecen esos pisos en óptimas condiciones.

Yo personalmente, tengo el convencimiento de que si estuviese en edad de crear una familia y por tanto con la necesidad de comprar una vivienda, entraría en una entidad bancaria, miraría las ofertas y al echar la vista atrás, sin la menor duda, saldría corriendo.
 

sábado, 9 de febrero de 2013

Un pabellón municipal en ruinas

No hace mucho tiempo que tuvieron que acometer urgentemente importantes obras en el Ayuntamiento de Orihuela ante los múltiples desperfectos que se habían creado en su estructura, con grave riesgo de derrumbe del edificio. Ahora le toca el turno al equipo de gobierno que, por lo que se ve, ha entrado en estado de demolición. Esa es la impresión que tenemos los ciudadanos que vivimos en esta ciudad, ya sea en la urbe como en la costa que estamos asistiendo atónitos al desmantelamiento progresivo del tripartito que unió sus fuerzas en coalición, una coalición que si bien no ofrecía perspectivas muy alagüeñas por la disparidad de las distintas siglas políticas que entraron a formar parte del gobierno municipal, sí confiábamos en que supieran crear políticas distintas capaces de solventar, en lo posible, las carencias más acuciantes de la población oriholana.

Ahora parece ser que las aguas transcurren por otros cauces; Los ediles que  gobiernan este municipio han creado tal zafarrancho de combate que ya se hizo patente desde el primer día. Y después de expulsiones, huidas y demás zarandajas, el tripartito se desmorona y queda rebajado a bipartito: Los Verdes y Psoe. O sea, en clara minoría frente a los populares que saltan jubilosos ante la inmediatez de atrapar de nuevo la alcaldía que perdieron en la pasada legislatura tras 25 años de gobierno municipal.

Ahora viene lo mejor: Según publica el diario alicantino "Información" el pasado día 6 de febrero, los populares oriholanos se declaran convencidos que desde la oposición ellos gobernarán con políticas de empleo, educación y servicios sociales ¿No les suena esto familiar? Resulta que yo, por ejemplo, que vivo en la costa oriholana con anterioridad a la actual legislatura, vio que se liquidó la máquina corrupta del ladrillo aquí no se ha hecho nada por la creación de empleo. Educación, llevan muchos años los niños en barracones tercermundistas sin que se vea un atisbo de resolver este problema. Y por último, si hablamos de servicios sociales, posiblemente por el hecho de vivir alejados del poder municipal, solamente contamos con un llamado Centro Cívico. Digo llamado por que parece mas bien privado, al estar ocupado por dos asociaciones culturales privadas. El resto: Casa de la juventud, hogar del pensionista etc. brillan por su ausencia. En pocas palabras, los mismos discursos que oímos a diario, y ya se sabe el resultado.