Se armó la marimorena

Aquella década de los ochenta fue sin duda para mi de extraordinaria labor narrativa al producirse una serie de sucesos que despertaron, más aún si cabe, la pasión periodística que siempre me ha acompañado a lo largo de mi vida. Aunque hay que subrayar que San Lorenzo del Escorial y su entorno han sido siempre una fuente de noticias de gran primicia para los medios tanto españoles como extranjeros por el hecho de tener en el Real Sitio el famoso Monasterio escurialense así como el Valle de los Caídos cuya ubicación se encuentra a caballo entre San Lorenzo del escorial y Guadarrama.

Pero no fue ninguna visita diplomática, monárquica o política lo que levantó los ánimos de los gurriatos durante aquel verano de los ochenta, fue mas bien la estancia de los cachorros de Blas Piñar, líder del movimiento político de ultra derecha "Fuerza Nueva" que no tuvieron mejor idea que acoplarlos en el camping del "Buen Aire" que está situado en la finca propiedad de  Patrimonio Nacional a la cual acuden en verano distinto grupos escolares en acampadas.

En esta ocasión de marras se pidió permiso para acampar allí Fuerza Joven y, ¡Se armó la gorda".

Para empezar comenzaron a desfilar por el recinto exterior del monasterio y calles del pueblo en formación militar y en tono desafiante lo que ya ocasionó distintos altercados con la población. Finalmente una noche en la que las terrazas del municipio estaban a rebosar de clientes tomando apaciblemente un refresco, De pronto se produjo una multitudinaria pelea entre las huestes de Blas Piñar y los jóvenes del municipio, pelea en la que no faltaron los puños, los palos e incluso se vieron objetos punzantes en medio de la refriega.

Tuvieron que intervenir las fuerzas de orden publico: policía municipal, guardia civil etc. y al día siguiente la noticia estaba en todos los medios de comunicación que calibraron el suceso como "El Motín de Aranjuéz.
Ante el monumental escándalo que se originó intervino el entonces Gobernador civil de Madrid Mariano Nicolás quien, junto con el alcalde del municipio Francisco Fernández Maganto, acordaron el cierre inmediato del campamento y posterior traslado de los jóvenes de "Falange Española" que iba a ser el segundo grupo en acudir al citado camping. Por si ¡las moscas!.