Esa fue la suma (7.000) firmas que consiguieron captar los miembros de Claro, único partido de la costa oriholana cuando estaban en la oposición. Para captar este importante número de firmas de los ciudadanos de este municipio, especialmente de los residentes de la costa, llevaron a cabo una eficaz campaña política encaminada a paralizar el mega proyecto urbanístico que un conocido promotor pensaba llevar a cabo en un terreno pegado al mar. Cala mosca, un idílico rincón costero que figura como el único rincón virgen que existe actualmente en la costa oriholana, y que por supuesto, contaba con el visto bueno de la anterior corporación municipal en manos del PP.
Aquellas firmas fueron depositadas en el seno de la Unión Europea por el líder de Claro Bob Houliston junto con un mensaje inequívoco de la ciudadanía oriholana que llevaba implícito el firme deseo de preservar esta zona verde del litoral alicantino que hasta entonces había estado al abrigo de la avaricia de los promotores urbanísticos, y por que este rincón marino era un remanso de paz para el disfrute de los habitantes del municipio.
Dicho proyecto quedó en suspenso, desde Bruselas pidieron informes a los responsables políticos de España y por ende, de la comunidad y ayuntamiento, y el asunto en cuestión dio alas a la cúpula de Claro para decir que gracias a su gestión probablemente no se llevarían a cabo la construcción de esta urbanización.
Pasa el tiempo, se celebran las elecciones municipales y surge la sorpresa, consiguen gobierno municipal tres partidos, entre ellos Claro. (El partido de la costa que se presentaba en coalición con Clr). Así las cosas los residentes de este populoso barrio de Orihuela acogimos con satisfacción el nombramiento del líder de Claro. pensando que por fin teníamos un representante municipal fijo en la costa, que podía mejorar sensiblemente las múltiples carencias que tenemos desde hace años los vecinos de este enclave costero.
Vana quimera, el concordato se rompió a los pocos meses, con la expulsión del inglés de la coalición municipal. Y ahora el partido Claro, con su líder a la cabeza le prepara el té al partido popular apoyándole en todo, incluido el que vuelva a gobernar este municipio. Y por supuesto, ahora si está de acuerdo en apoyar implícitamente el proyecto urbanístico de Cala mosca. ¿Que piensa hacer el señor Houliston con las siete mil firmas? tendrá que volver a Bruselas y explicar al Parlamento Europeo que las firmas que allí depositó se pasará otro día a recogerlas.
Este tema me hace recordar las palabras del señor Houliston en una entrevista que le hice cuando tomó posesión como concejal de la costa y me dijo lo siguiente: "Nosotros vamos a luchar con todas nuestras fuerzas políticas y personales para preservar esta última zona verde y de gran valor ecológico que le queda a Orihuela costa". Ahora por lo que se ve luchará por motivos mas...poderosos.
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